Laura Hevia

“La violencia psicológica es muy difícil de notar, uno piensa que son situaciones que bueno, se van dando y ya van a mejorar”. Laura Hevia, periodista con 13 años de trayectoria en Neuquén, advierte sobre lo difícil que es poder percibir algunas violencias, hasta que llegan a un límite. Laura vivió una experiencia laboral traumática en Canal 7 de Neuquén. Tras la venta del canal a una nueva sociedad, se le prometió la conducción del noticiero, lo que la llevó a renunciar a su trabajo principal en la Municipalidad. Sin embargo, esta promesa nunca se materializó y, tras meses de incertidumbre, fue despedida sin justificación. “El mismo gerente se encargaba de presentarme a mí como la nueva conductora del noticiero”, relata Laura sobre las expectativas generadas. A pesar del entusiasmo inicial, pronto comenzaron las irregularidades. Su sueldo fue congelado y nunca se le ofreció un contrato formal. “No tenía absolutamente nada legal que me avalara que yo estaba ahí trabajando”, denuncia. La presión para obtener beneficios para el canal también fue un factor de tensión. “Me dice que esa era la orden de los dueños: hacer un informe contra una empresa con el fin de que esa empresa ponga pauta en el canal”, recuerda Laura sobre la solicitud del gerente. A pesar de su negativa a realizar el informe, la presión continuó. “Las empresas me tienen que tener miedo a mí”, le dijo uno de los dueños del canal en una reunión. Finalmente, tras un breve periodo como conductora suplente y sin cobrar sueldo por ello, Laura fue despedida sin previo aviso. “Me llama al frente de noticias con el director del canal y me dice que me tenía que ir”, relata sobre el sorpresivo despido. “Me obligó a firmarlo”, dice sobre el papel que la desvinculaba del canal sin explicaciones. Este episodio no solo afectó su carrera profesional, sino también su bienestar emocional. “Me generó mucha angustia”, se sincera Laura. “Me borraron de un plumazo como si hubiera hecho algo malo”. Amargamente reflexiona que la falta de apoyo del sindicato y la ausencia de protocolos internos en el canal la dejaron en una situación de vulnerabilidad.